¿Cuánto cuesta un músico?

Cuando un músico no valora su trabajo otros lo harán por él. El equilibrio entre el salario emocional y el salario económico tiende a inclinarse hacia el primero, como si poesía y lucro fueran conceptos incompatibles.

El músico promedio estima no estar suficientemente valorado. Sin embargo, acepta trabajar gratis o -lo que es peor- acepta hacerlo mal pagado. Solo hay algo peor que un músico minusvalorado: esto es, un músico que explota a otro músico.

Ningún músico debería:

    1. trabajar gratis aunque el salario emocional compense
    2. trabajar sin pasión aunque el salario económico compense

Son muchos músicos los que afirman que tal combinación no es posible pero, habida cuenta que muchos músicos (curiosamente lo más valorados emocional y económicamente) lo llevan a cabo, la lógica de los hechos probados dicta que sí se puede.

Aquel músico que acepta trabajar gratis (si es profesional, se entiende) pierde todo el derecho a la queja.

Músico: si no te pones precio, otros lo harán por ti y no dudes que no será el que te corresponde.

Marketing elemental para músicos expertos
Juan F. Ballesteros